Y ya que estamos con las pelis, hace poco vi este señor peliculón. No sé hace cuanto tiempo que no lloraba, pero vaya, esto me hizo ponerme como un niño pequeño, con solo recordar ciertas escenas vuelvo a derramar alguna lagrima, como si tuviera un hechizo mágico. Sin duda de las mejores películas que he visto en mi vida.