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- 23 Ago 2019
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A ver..., estoy entre medios de transporte y con el móvil, por lo que no tengo una imagen panorámica de lo escrito..., por lo cuál no quedará fatal y quizás me explique mal, ante cualquier duda intentaré responder;además hay mucho latinoamericano y quizás tengamos problemas con el vocabulario y costumbres /tradiciones por lo que buscaré la mejor manera de entendernos.
Ahí voy co.
Cuando tenía unos 5 años eran las fiestas de mi pueblo, es tradición por la mañana que haya vacas(las vacas son vacas que corren por las calles del pueblo a las cuales se les recorta - cambio de dirección en el ultimo momento para que pasen de largo-principalmente) En las vacas las puertas están abiertas para que los valientes puedan entrar y protegidas para que no entre el animal en cuestión (punteros de obra o maderos)
Es un ambiente de mucho jolgorio, con un ruido intenso azuzando a las bestias en los que se implica la comarca(varios pueblos) en un espacio reducido. También se ponen por las calles carros de tractor para tener más vías de escape.
Pues el día de la fiesta mayor se congrega mucha gente y la gente se pone en las puertas para verlas más de cerca, el olor a sangre es algo excitante para el ser humano.
Entonces estaban mis padres, abuelos, tíos y demás en la puerta y yo detrás en el hall.
Soy el pequeño de la pequeña, por lo que me le llevo unos años con mis primos hermanos (los cuales estaban en un remolque de un tractor y no me dejaban estar con ellos por peligro)
Yo enfadado me fui a la cocina y después volví al hall(la entrada de la casa) y me quedé a 5 metros de la puerta entre los gritos de la gente.
Entonces ocurrió, de repente apareció ante mí un ser de energía, era como chispas contenidas en un tubo con forma humanoide y se puso a hablar conmigo. Le conté mi frustración y le dije que quería ir con mis primos pero no podía porque estaba la vaca en la puerta de mi casa.
Me dijo que el me protegería y no me iba a pasar nada, entonces le pregunté si era mi ángel de la guarda, dijo que sí pero no lo creí (creí que me iba a proteger pero lo del ángel era una mentira piadosa)
Entonces fui directo a la puerta, me cole entre las piernas y salí de casa.
Tenía a la bestia delante, babeando ante los gritos y recortes de la gente y se me quedó mirando. Yo tranquilo mientras me decían que volviera corriendo, cogió la vaca y se fue la vaca mansamente en dirección contraria donde estaban mis primos y mientras iba hacia ellos me agarro mi madre y me metió en casa con la bronca consiguiente.
Os ha pasado algo parecido?
@NORDICAT, lo prometido es deuda co.
Ahí voy co.
Cuando tenía unos 5 años eran las fiestas de mi pueblo, es tradición por la mañana que haya vacas(las vacas son vacas que corren por las calles del pueblo a las cuales se les recorta - cambio de dirección en el ultimo momento para que pasen de largo-principalmente) En las vacas las puertas están abiertas para que los valientes puedan entrar y protegidas para que no entre el animal en cuestión (punteros de obra o maderos)
Es un ambiente de mucho jolgorio, con un ruido intenso azuzando a las bestias en los que se implica la comarca(varios pueblos) en un espacio reducido. También se ponen por las calles carros de tractor para tener más vías de escape.
Pues el día de la fiesta mayor se congrega mucha gente y la gente se pone en las puertas para verlas más de cerca, el olor a sangre es algo excitante para el ser humano.
Entonces estaban mis padres, abuelos, tíos y demás en la puerta y yo detrás en el hall.
Soy el pequeño de la pequeña, por lo que me le llevo unos años con mis primos hermanos (los cuales estaban en un remolque de un tractor y no me dejaban estar con ellos por peligro)
Yo enfadado me fui a la cocina y después volví al hall(la entrada de la casa) y me quedé a 5 metros de la puerta entre los gritos de la gente.
Entonces ocurrió, de repente apareció ante mí un ser de energía, era como chispas contenidas en un tubo con forma humanoide y se puso a hablar conmigo. Le conté mi frustración y le dije que quería ir con mis primos pero no podía porque estaba la vaca en la puerta de mi casa.
Me dijo que el me protegería y no me iba a pasar nada, entonces le pregunté si era mi ángel de la guarda, dijo que sí pero no lo creí (creí que me iba a proteger pero lo del ángel era una mentira piadosa)
Entonces fui directo a la puerta, me cole entre las piernas y salí de casa.
Tenía a la bestia delante, babeando ante los gritos y recortes de la gente y se me quedó mirando. Yo tranquilo mientras me decían que volviera corriendo, cogió la vaca y se fue la vaca mansamente en dirección contraria donde estaban mis primos y mientras iba hacia ellos me agarro mi madre y me metió en casa con la bronca consiguiente.
Os ha pasado algo parecido?
@NORDICAT, lo prometido es deuda co.