El error de su hijo le costó 800 euros. Confundió un mini PC con un PC Gaming y compró un equipo incapaz de satisfacer sus necesidades.
Como señala el padre, su hijo no podrá disfrutar de los títulos más exigentes del mercado
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El error de su hijo le costó 800 euros. Confundió un mini PC con un PC Gaming y compró un equipo incapaz de satisfacer sus necesidades
A la hora de comprar un PC Gaming, existe un consejo indispensable que todo el mundo debería seguir: asegúrate de lo que estás comprando. Por desgracia, a...
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